Me encantó leer el otro día una carta en Diario del Altoaragón narrando una de esas cosas que, no sé por qué extraña razón, tendemos a obviar mientras nos empeñamos en resaltar lo negativo.
Hoy, salvando las distancias, me ha sucedido algo que quiero destacar. Eran las 13'47 y me disponía a estacionar en una zona azul. Aparcar a esas horas conlleva tener la duda de si sacar o no el ticket pues, si no me equivoco, hay un período de gracia de diez minutos sin que te multen. El caso es que estaba yo dudando (y por tanto, sintiéndome vivo) cuando el conductor del vehículo que me cedía el sitio se ha quitado el cinturón de seguridad, ha bajado del coche y me ha entregado su ticket, cuya validez alcanzaba hasta las 16'35. Sólo era un papel arrugado por valor de unos pocos céntimos, pero qué detallazo. ¡Olé!
Ps.: No he mirado el reverso del ticket. Espero que no fuera "personal e intransferible" (no estoy dando ideas a los munícipes...) y, ahora que está de moda, me venga a buscar la policía por contar mis alegrías en la bitácora.
Hoy, salvando las distancias, me ha sucedido algo que quiero destacar. Eran las 13'47 y me disponía a estacionar en una zona azul. Aparcar a esas horas conlleva tener la duda de si sacar o no el ticket pues, si no me equivoco, hay un período de gracia de diez minutos sin que te multen. El caso es que estaba yo dudando (y por tanto, sintiéndome vivo) cuando el conductor del vehículo que me cedía el sitio se ha quitado el cinturón de seguridad, ha bajado del coche y me ha entregado su ticket, cuya validez alcanzaba hasta las 16'35. Sólo era un papel arrugado por valor de unos pocos céntimos, pero qué detallazo. ¡Olé!
Ps.: No he mirado el reverso del ticket. Espero que no fuera "personal e intransferible" (no estoy dando ideas a los munícipes...) y, ahora que está de moda, me venga a buscar la policía por contar mis alegrías en la bitácora.