Antes de que el lector de libros electrónicos aterrizara en mi vida, sin lugar a dudas mi dispositivo electrónico favorito era mi receptor GPS. Al igual que en el caso de los lectores de libros electrónicos, voy a intentar esbozaros unos conceptos básicos acerca de esta fantástica tecnología con el fin de que seáis capaces de sacarle todo el jugo posible, que de veras es mucho.
¿Qué es un GPS?
Como indican sus siglas, GPS (Global Positioning System) es un sistema de posicionamiento global basado en tecnología satélite. En definitiva, es un sistema que nos permite conocer la posición de una persona o un objeto cualquiera en cualquier parte del mundo con una precisión habitualmente de unos pocos metros. Para ello se utilizan unos satélites geostacionarios (concretamente el sistema actual utiliza 24 satélites) gracias a los cuales un receptor GPS puede calcular su posición mediante triangulación. El hecho de que sea necesaria cobertura satelital hace que los dispositivos GPS estén principalmente pensados para su uso en exteriores, ya que la cobertura de los satélites en el interior de edificios o túneles se atenúa notablemente.
Coloquialmente, cuando hablamos de GPS, en realidad nos estamos refiriendo a un "receptor de GPS". En adelante, utilizaremos ambos términos indistintamente.
¿Qué tipos de GPS hay? En definitiva, ... ¿qué GPS me compro?
Ahora que ya sabemos para qué sirve un GPS (conocer la posición), es importante conocer las tipologías de receptores que nos podemos encontrar en el mercado con el fin de ajustar la adquisición a nuestras necesidades.
Básicamente, nos podemos encontrar los siguientes tipos de receptores GPS:
- GPS para conducir
- GPS para actividades de campo/montaña
- GPS para actividades deportivas
- GPS para navegación marina
- GPS para gestión de flotas o ubicación de objetos o personas
A continuación hablaremos un poco más acerca de cada uno de ellos.
GPS para conducir
De todas las tipologías, son los más populares. La posición calculada por el receptor unida a la cartografía que incluye el dispositivo permite funcionalidades como el cálculo de rutas, la localización de puntos de interés (estaciones de servicio, etc..) y las famosas locuciones con indicaciones al conductor acerca de qué camino seguir para llegar al destino.
Las diferencias de precio entre unos dispositivos y otros estarán principalmente en las cartografías que incluyan, su calidad y los períodos de actualización de las mismas (tened en cuenta que van surgiendo nuevas carreteras y desapareciendo otras y es preciso que los mapas de nuestro GPS estén debidamente actualizados). También algunos equipos incluyen funcionalidades avanzadas que, mediante el uso de comunicaciones de datos (como las de nuestro teléfono móvil) obtienen información del estado de tráfico, obras y demás incidencias y la utilizan para recomendar la ruta óptima en cada momento.
Permitidme que en este punto haga un inciso. Como hemos visto al principio, un GPS se limita a calcular la posición. Por tanto, un GPS no detecta radares. Lo que sí se puede hacer es incluir en la cartografía del dispositivo las coordenadas de los radares fijos conocidos de manera que, al igual que se hace con otros puntos de interés, el GPS nos avise cuando nos acerquemos a la posición de dicho radar fijo. Pero ojo, si la ubicación del radar fijo cambia o se instala un radar fijo nuevo y no actualizamos la información almacenada en nuestro receptor, el GPS no nos podrá avisar. En definitiva, un GPS puede funcionar como avisador de radar pero un GPS no es un detector de radar ni mucho menos un inhibidor de radar. Que no os den gato por liebre.
GPS para actividades de campo/montaña
En esta categoría incluimos aquellos receptores que están especialmente destinados para orientarnos en nuestras actividades al aire libre por el campo o la montaña. Lo normal es que estos receptores permitan que se les incluya cartografía pero una cartografía diferente a la de los GPS orientados a conducir. Mientras que para conducir nos interesan mapas auto-enrutables, en un GPS para actividades de campo o montaña nos interesa tener cartografía con información topográfica (curvas de nivel, senderos, pistas, ...) e incluso modelos digitales del terreno (DEM) que nos den información acerca de las altitudes. Las funcionalidades que diferencian unos receptores de otros son la calidad de los mapas precargados, la posibilidad de incluir mapas personalizados al dispositivo, la disponibilidad de almacenamiento extra (en forma de tarjeta de memoria) para incluir nuevos mapas, la disponibilidad de brújula electrónica y altímetro barométrico (más preciso que el propio del receptor GPS), el número de puntos o rutas que se pueden almacenar, la resistencia al agua o la autonomía del dispositivo. Los modelos más modernos empiezan a incluir pantallas táctiles e incluso cámaras de fotos que permiten geo-referenciar las fotografías que tomamos adjuntando a la fotografía la información de la ubicación donde fue tomada.
En mi opinión, estos dispositivos tienen muchísimas posibilidades más de las que por defecto nos facilitan los fabricantes. Afortunadamente, por la red hay muchísimos recursos (tutoriales, mapas, etc..) así que intentaré elaborar una entrada adicional explicando cómo sacarle todo el jugo a estos fantásticos dispositivos.
GPS para actividades deportivas
En ocasiones, las funcionalidades de un GPS para actividades de campo o montaña superan nuestras necesidades. Si lo que queremos es básicamente registrar nuestra actividad deportiva para poder procesarla a posteriori y conocer los kilómetros que hemos corrido, por dónde, a qué ritmo, etc... no necesitamos que el GPS incluya cartografía o brújula electrónica pero sí que sea un dispositivo lo más portátil posible. Es aquí donde surge la categoría de GPS para actividades deportivas.
Bajo este paraguas vamos a englobar los GPS's tipo reloj de muñeca. A las funcionalidades habituales de un reloj deportivo avanzado (cronómetro, pulsómetro, ...) la tecnología GPS le añade la capacidad de conocer el ritmo o velocidad, la distancia recorrida y cualquier funcionalidad relacionada con la posición. Al igual que sucede con los GPS's para actividades de campo o montaña, las utilidades software que proporcionan los fabricantes suelen ser bastante limitadas pero existen programas realmente interesantes (como por ejemplo Sport-Tracks) con los que podemos disfrutar enormemente la información que obtenemos con nuestro dispositivo acerca de la actividad realizada.
Las principales diferencias entre los equipos disponibles en el mercado están en el número de puntos y recorridos que pueden almacenar, en los accesorios incluidos (pulsómetro, sensor de cadencia de pedaleo, soporte para bicicleta ...), el tamaño (cuidado, porque a veces puede pasar que se maneje mejor un dispositivo un poco más grande), la resistencia al agua o la disponibilidad de tecnología inalámbrica para descargar los datos registrados a nuestro equipo o compartirlos con nuestros amigos.
A caballo entre esta categoría y la anterior estarían los equipos específicamente diseñados para su uso en principal en bicicleta de montaña. En mi opinión, están más cerca de la categoría de GPS para actividades de campo o montaña ya que en este caso disponer de mapas en el dispositivo puede ser de gran ayuda. No obstante, es importante también - si lo vamos a utilizar para este tipo de actividad- que nos aseguremos de que el dispositivo esté debidamente adaptado para mostrarnos la velocidad, tiempo, distancia recorrida en un formato adecuado para ser utilizado desde la bicicleta.
GPS para navegación marina
Son los receptores especialmente diseñados para las actividades de navegación marina. Personalmente, es una categoría que apenas conozco así que poco os puedo contar.
GPS para para gestión de flotas o gestión de la ubicación de objetos o personas.
Como hemos remarcado durante toda la entrada, la principal funcionalidad de un GPS es la de posicionamiento. Así, podemos disponer de sencillos receptores GPS cuya única funcionalidad sea almacenar su posición actual e informarla a través de un transmisor incluido a una central de datos desde la cual se puede gestionar la información de ubicación proporcionada. Tal es el caso de la gestión de flotas o también de objetos o personas si queremos conocer su posición en todo momento.
Un último inciso: GPS y teléfonos móviles y dispositivos tipo tableta.
En la actualidad cada vez es más habitual que dispositivos móviles como teléfonos o tabletas incluyan también un chip GPS. Con estos dispositivos móviles podemos disponer de la práctica totalidad de funcionalidades anteriormente explicitada en las diversas categorías. Eso sí, tened en cuenta que la finalidad principal para la que han sido diseñados esos dispositivos no es la de GPS y aspectos tan clave como la autonomía de la batería se verán claramente perjudicados. En definitiva, podemos darle uso de manera puntual, pero no pretendamos obtener el mismo rendimiento de un teléfono móvil que de un GPS para montaña si nos vamos a hacer una excursión de cinco o seis horas (esto no quita que os recomiende que si os cambiáis de móvil, elijáis uno que disponga de GPS)
Por su parte, los teléfonos móviles utilizan también las antenas emisoras para triangular la posición y "asistir" la información proporcionada por los satélites (esto es muy útil cuando la señal satelital es débil por encontrarnos en zonas interiores).
Conclusión
Espero que tras leer esta entrada tengas una composición clara de las diferentes tipologías de receptores GPS existentes en el mercado. Si te ha picado el gusanillo, rastrea diferentes tiendas y foros para encontrar el que más se ajuste a tus necesidades y presupuesto. En próximos artículos, intentaremos dar consejos para exprimir al máximo todas sus funcionalidades
Referencias y lecturas para saber más
No hay comentarios:
Publicar un comentario