domingo, 25 de marzo de 2007

Desubicado

Cada vez me repugnan más los métodos que siguen los grandes tanques de guerra política en este país. Conforme se acerca cualquier cita electoral aumentan la potencia de sus aspiradores de votos y sus ventiladores de bazofia, pasando por encima de cualquiera que se ponga en medio.

No, esto no es un manifiesto anti-PP. Ni tampoco anti-PSOE o contra cualquier formación concreta. Intenta ser una reflexión desde alguien que se siente desubicado, desmotivado y preocupado ante la bipolaridad que se nos intenta inculcar de manera irresponsable a los ciudadanos de a pie. Las ansias de poder político y también -no lo olvidemos- mediático prentenden encasillarnos en dos bandos enfrentados - o conmigo o contra mí- cuando, mirado objetivamente el comportamiento de los mandamases en este país suele ser muy parecido una vez parapetan sus posaderas en la poltrona correspondiente.

Me siento desubicado, no encuentro a quien me represente con la mínima dignidad para motivarme a ir a votar, cosa que por otra parte siento como una obligación.

Me parece una vergüenza el esperpento del otro día con Otegui. Me indignó en su momento la prepotencia de Aznar. No soporto a Acebes ni a Zaplana, ni a Blanco ni a Trujillo. Jiménez Losantos me parece un peligro al igual que determinados monopolios informativos.

Me da igual el color, siempre es lo mismo. Si me permitís el símil, voy a comparar la política española con nuestro placebo nacional: el fútbol. Lo que pasa entre los grandes partidos es como lo que sucedía (ahora ya menos) entre el Madrid y el Barcelona. Los dirigentes vendían en la prensa grandes desencuentros y polémicas incitando a los ciudadanos de a pie a encarnizadas riñas y discusiones. Sin embargo, a la hora de la verdad todo era mentira, un mero espectáculo para vender más periódicos y aumentar las audiencias de los espacios deportivos. Ya se ocupan bien el Madrid y el Barcelona de ir juntitos de la mano cuando se trata de aplastar a clubes más pequeños en cosas como los sorteos de la Copa del Rey o similares.

En fin, qué triste. Yo por mi parte me voy a mentalizar para mirar la actualidad sin forofismos y pensar en las cosas que realmente me importan y que - vaya casualidad- no suelen ser titulares en ningún medio de comunicación.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

¿y tú sabes q en el blog del candidato de la CHA ( Solana) hay una referencia a tu blog???? jejejeje

Nacho Alastruey Benedé dijo...

Amaya:

No comprendo qué quieres decir.

:?

HombreRevenido dijo...

Acertadísima reflexión, Nacho. Comparto absolutamente tu opinión. Estoy harto de poltítica ficción.

Anónimo dijo...

Pues suscribo tu comentario...

Casi a diario, cuando leo el periódico o escucho noticias en la radio, me planteo qué es lo que nos lleva a votar a unos u otros en las elecciones puesto que veo los mismos desencantos que comentas. Al final sólo llego a que por alguna razón (difícil de determinar) confiamos más en un partido que en otro. La confianza es lo más fácil de perder y lo más difícil de ganar y eso nos ha llevado algunos a este hastío.

Añoro el día en que los políticos se pongan a discutir de una manera civilizada sobre temas que en realidad nos interesen. Si es difícil que un tema interese, a lo mejor una discusión con argumentos interesaría... pero sin lo uno y sin lo otro, ¿queda votar en blanco?

Angel dijo...

Hola Nachete, a lo peor Amaya se ha entendido que.....,vamos ya me entiendes….

Hace poco me preguntaban en el curro que que radio oía por las mañanas y claro, les dije que LA MAXIMA FM (y no es publicidad, y tampoco verdad), que aparentemente es políticamente correcta, y aunque creo no me creyeron parece que “colo” y me dejaron tranquilo.
Es tal el nivel de crispación que han conseguido esta cuadrilla de mardanos –TODOS- que entrar a un trapo tan tonto como ese te puede llevar a discutir muy en serio. Los telediarios son casi como partes de guerra, depende cual escuches las bajas son muchas de un lado o de otro, en fiiiiin, HASTA LOS H.

Y estoy con vosotros que no apetece dar nuestra confianza a nadie, más cuando sabemos, porque lo han demostrado los de un lado y otro, que no se la merecen. Pero es mucho peor no expresar nuestra opinión, la que sea, y ver si de una vez se callan y se ponen a currar como deberían de hacer: En silencio, con humildad y pensando en los ciudadan@s de cada rincón,. Que hay mucho por hacer.

Nacho Alastruey Benedé dijo...

Hombre Revenido:

La reflexión que hiciste en su día me gustó muchísimo. Poco que añadir.

¡Saludos!
_______________

Anónimo:

Lo malo de votar en blanco es que ya casi no nos queda ni eso, pues siempre hay algún iluminado que trata de apoderarse de los votos en blanco como si fueran suyos.

Lo que debemos fomentar entre todo es que la gente preparada -que los hay- despunte y desbanque a los voceras que se piensan que la razón es proporcional a los decibelios con que gritan.

Saludos.

___________

Ángel:

El otro día me comentaba un amigo que en su trabajo han dejado de escuchar cadenas generalistas y han optado por radiofórmulas musicales. No lo soportaban más y, sinceramente, les comprendo perfectamente.

Efectivamente, hay mucho que hacer. A ver si entre todos hacemos que se pongan de una vez.

Un abrazo.

______________

Anónimo dijo...

Pués sí, estoy con vosotros. Da asco ver como los dos grupos mediáticos más influyentes manipulan a su antojo. Al menos uno de ellos no oculta su tendencia, el otro es más sibilino y se las da de independiente. También es lamentable lo poco que reflexionamos cuando nos apuntamos a un bando ciegamente, sin actitud crítica (lo que está muy extendido).
La pena es no poder pasar, pués entiendo que últimamente hay demasiado en juego, lo tenemos difícil.
Una cosa creo tener clara, estamos yendo marcha atrás, poco de lo que se hace es constructivo.

Nacho Alastruey Benedé dijo...

Anónimo:

De acuerdo en todo, pero con un matiz esperanzador: los que habéis ido comentando pensáis más o menos igual. Por tanto, las cosas pueden mejorar.

Sólo es cuestión de hacernos oir (sin que eso signifique gritar...)

Saludos