Creo que pocas veces habré tenido tantas ganas de gritar algo a los cuatro vientos desde el Salto de Roldán como ahora. En las próximas entradas voy a intentar narrar algunas de las sensaciones que me han deparado dos semanas en Etiopía. Tengo claro que por mucho que atine con las yemas de los dedos en el teclado, lo relatado quedará muy lejos de lo vivido pero me siento con la necesidad y sobre todo con la ilusión de intentar transmitiros mis sentimientos.
Lo que encontraréis en las próximas entradas es el relato subjetivo de la Etiopía que he tenido la suerte de vivir durante quince días. No pretendo, por tanto, ni sentar cátedra ni hacer juicios de valor sobre el país o sus gentes. Supongo, que como pasa con todo en esta vida, cada uno tendrá su visión. Espero que disfrutéis la mía.
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Nota del Autor: Basándome en las notas manuscritas que he ido tomando en una libreta, respetaré las fechas reales del viaje aunque la publicación real sea ya desde mi querida Huesca, unos cuantos días después. Al final de cada entrada, pondré la fecha real en la que la escribo
[Escrito el 11/09/2013]
Enlace a la próxima entrada: [Etiopía - 01] Preparativos y viaje
[Escrito el 11/09/2013]
Enlace a la próxima entrada: [Etiopía - 01] Preparativos y viaje
2 comentarios:
Un viaje intenso y lleno de emociones. Gracias por compartirlo.
@HombreRevenido:
Agradezco el elogio, sí, pero ello no mitiga la indignación que me corroe por su injustificable ataque a las castañas de mazapán desde su tribuna bloguera .
Dése por golpeado con un guante en la jeta y elija lugar para la contienda.
Ps.: Si puedo elegir arma, elijo unos adoquines del Pilar.
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