"Estamos en fiestas" se convierte en demasiadas ocasiones en un salvoconducto impersonal para ensanchar la manga ante comportamientos que bajo ningún concepto se consentirían durante el resto del año. No seré yo quien diga que está mal ensanchar un poco la manga con motivo de los fastos laurentinos pero creo que hay límites que jamás se debería permitir sobrepasar.
Convertir las calles, portales y locales en letrinas o tratar nuestros parques como vertederos son conductas lo suficientemente intolerables como para que fueran debidamente sancionadas con independencia de la fecha. La excusa de que "estamos en fiestas" deja de ser válida cuando hay oscenses que tienen que vivir en primera persona las consecuencias de los actos de aquellos que mancillan la palabra "fiesta" con su falta de respeto por los demás.
Fiesta es diversión, sí. Pero también respeto y convivencia.
Determinadas acciones deben tener su consecuencia con independencia de la fecha. En Huesca existe una ordenanza de Convivencia. Para todo el año. Aplíquese.
3 comentarios:
Cierto! Oso ondo
Me temo que hay cosas que son manifestación de la deriva de nuestra sociedad.
Entonces, amigo Modestino, tendremos que hacer algo para cambiar la tendencia. Me niego a aceptar una sociedad que desprecie algo tan necesario como el respeto.
¡Un abrazo!
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